La verdad es que no suelo hablar mucho de cine o series en este blog, pero la ocasión lo merece. El próximo mayo finaliza tras ocho temporadas la que podría considerar una de mis series favoritas, House.
Bien es cierto que llevo tiempo que no sigo regularmente las andanzas del doctor Greg House, pero de vez en cuando veo varios episodios de una sentada, y reconozco que me engancha, me gusta.
Reconozco que no es una serie que deba prolongarse mucho tiempo, como por ejemplo C.S.I., en cualquiera de sus vertientes, y que su final es mejor ahora, por poco que nos guste a sus seguidores.
Después de ocho temporadas, en mayo llegará el momento de decir, hasta siempre doctor House.
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